Cuando atendemos a personas con movilidad reducida nos damos cuenta de que el mundo no es especialmente comprensivo. Las cosas que parecen más fáciles se nos complican.

Y eso es un problema a la hora de ofrecerles cierta autonomía. Sobre todo si hablamos del momento de vestirse. Porque, cuantas más trabas encuentren, más podría crecer su frustración.

Desde mSoluciona Valencia Centro abogamos por facilitarles la vida y mantener su dignidad. Por eso vamos a ofrecerte unos consejos que te sirvan de ayuda.

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Los detalles previos que debes considerar

Perder ciertas funciones físicas nunca es fácil. Pero hacerlo mientras tus facultades mentales están perfectas ¡podría considerarse una crueldad para muchos!

Es por eso que debes asegurarte de que la persona a la que quieres ayudar se sienta cómoda. Respeta su intimidad y su privacidad. Hazlo en su habitación o a solas y asegúrate de que la temperatura ambiental es apropiada.

No hagas nada inesperado y anuncia tus movimientos con antelación. Tampoco trates de hacerlo todo a la primera, permite que la otra persona participe.

Presta atención a lo que haces y focalízate en las prendas de ropa para no provocar incomodidades. Y, antes de empezar, es mejor que la otra persona esté sentada y estable para facilitar las cosas.

Pasos a seguir para vestir a otra persona

Permite que sea la otra persona quien inicie la tarea, bien desabrochando botones o bien como pueda. Puedes pedirle que se incline un poco hacia delante para quitarle la prenda o prendas de la parte de arriba. Y ponerle la siguiente. En caso de ser solo una pieza, como una camiseta o un jersey.

Por otro lado, si la personas a quien estás ayudando ha sufrido un ICTUS y ha perdido movilidad en un lado del cuerpo, empieza siempre por ese. Así te resultará más fácil.

Un consejo es sustituir los botones por velcro en las camisas, también en tiras pequeñas o cuadraditos. El velcro ofrece menos resistencia y podría facilitarles la labor, dotándoles de más autonomía.

Un truco es que pedirle que se ayude de las rodillas. Por ejemplo, si tiene que quitarse una camisa, puede sujetar un lado entre las piernas y mover el torso para quitársela del todo por sí mismo.

Recuerda al terminar recolocarle la parte de los hombros.

Y, respecto a la parte de abajo, lo más importante será la estabilidad. Puedes arrodillarte y pedirle que se apoye en ti o buscar una posición en la que pueda apoyar la espalda. Como recostado.

Si tienes cualquier duda o necesitas personal de asistencia para estas tareas llámanos o contacta con nosotros. En mSoluciona Valencia Centro nos encantará poder ayudarte.

Y siempre recuerda que envejecer en casa no es una moda ni una tendencia. Es un derecho.