Empleada de hogarEn estos tiempos de estrés omnipresente, de evidente falta de tiempo y de sobrecarga de tareas fundamentalmente en el ámbito laboral y profesional, nos es fundamental que alguien nos ayude en casa. En este sentido, los beneficios de una empleada del hogar resultan más que obvios, pues se trata de profesionales conocedoras de las labores que minuciosamente han de desempeñar:

Conocen los productos de limpieza que han de emplear para cada superficie concreta, y con ello obtener resultados óptimos en cuanto al aspecto de esa superficie, desinfección, aroma…

Conocen también en profundidad los instrumentos y utensilios que han de emplear para su trabajo, y que no siempre se corresponden con los sencillos útiles domésticos que solemos emplear, sino que requieren de la selección y manejo de profesionales, por la gran variedad de ellos que existen en el mercado.

Conocimientos de cocina. Además, también es habitual que las empleadas del hogar posean conocimientos culinarios a un nivel profesional, y, además, sepan seleccionar previamente los productos adecuados para preparar.

Lavar y planchar la ropa. También al respecto, las empleadas domésticas saben trabajar con gran rapidez y eficiencia. El tratamiento de la ropa, incluyendo las prendas delicadas, poner las lavadoras, combinar diversos tipos de planchado, etc, son igualmente objeto de una labor altamente profesionalizada. Ello incluye también la organización de los armarios roperos.

Aspirar y eliminar el polvo y otros agentes tóxicos de cualquier superficie, con los resultados beneficiosos en cuanto a salubridad que ello comporta.

Los beneficios de una empleada del hogar en este aspecto son indudables, pues con su bagaje en estas labores tan imprescindibles, darán a nuestro hogar el aspecto impecable y la armonía que le es fundamental.

Las empresas de contratación de servicios y sus ventajas

Además de todo ello, las empresas de contratación nos ofrecen otros tantos beneficios al respecto, que hacen más fácil contar con una buena profesional en este ámbito. Así:

  • Facilitan y agilizan los trámites de contratación y Seguridad Social de la empleada del hogar.
  • Seleccionan a las profesionales más sólidas y experimentadas por su trayectoria.
  • Facilitan asimismo todo lo relacionado con bajas, sustituciones, permisos, etc. De este modo, si la empleada no puede acudir durante un período determinado de tiempo por enfermedad o cualquier otra causa, la empresa de contratación puede proporcionar rápidamente la incorporación inmediata de una sustituta.

De este modo, contratar a las empleadas domésticas a través de una empresa especializada puede ser la opción más indicada para aquellos que lógicamente aspiren al mejor servicio posible.

Los beneficios de contratar a una empleada doméstica

Además, existen otros tantos concretos beneficios de contratar a una trabajadora doméstica, y estos se pueden resumir en dos vertientes. La primera sería desde la perspectiva de la empleada:

  • Puede disfrutar de vacaciones, días libres, y de los permisos que necesite, siempre dentro de los límites establecidos legalmente por el Real Decreto Legislativo del texto refundido del Estatuto de los Trabajadores.
  • Además, pueden disfrutar de las bajas correspondientes por enfermedad, maternidad, accidente, etc, así como de las reducciones horarias por maternidad, lactancia y otros motivos, y que todo ello lo cubra la Seguridad Social. De esta manera, los problemas de salud o de conciliación con aspectos fundamentales de la vida laboral no habrán de suponer graves trastornos ni la pérdida del puesto de trabajo.
  • Tienen garantizado un salario mínimo interprofesional (con sus prorratas correspondientes), que viene establecido cada año por Real Decreto del Consejo de Ministros.
  • También tendrán garantizada la información básica sobre los requisitos laborales en que han de desenvolverse, y ello figurará como información en el contrato correspondiente.

Y desde el punto de vista del empleador, los beneficios también son notables:

  • Beneficios fiscales y descuentos en la Seguridad Social, dependiendo ello también de la antigüedad de la empleada.
  • Por supuesto, y como ya hemos dicho, contar con una buena profesional que lo descargue de los diarios quehaceres domésticos.
  • Contar con un hogar más impoluto, ordenado y armónico que nunca, y no tener que preocuparse por todo lo relacionado con ello.

Así pues, los beneficios de una empleada del hogar están claros, y acaso es la ayuda que pueda sernos indispensable en casa.